Mujeres y laicos, tras 11 siglos, entran en el Consejo de Gobierno de la Diócesis de Zamora

Han tenido que pasar once siglos de la fundación de la Diócesis de Zamora en el siglo X para que por primera vez el Consejo de Gobierno, el órgano que puede asemejarse a un Consejo de Ministros pero en el ámbito eclesiástico y provincial, cuente entre sus miembros con personas laicas no dedicadas a la vida consagrada y con mujeres.

Esa "revolución" acorde con los nuevos tiempos marca también el paso a otras diócesis españolas, ya que se trata de la primera provincia eclesiástica española que designa a dos personas laicas y a dos mujeres dentro de los ocho nombres que acompañarán al obispo, Fernando Valera, en el órgano de mando del Obispado. De esta forma, la Diócesis de Zamora ha hecho historia y como único precedente en España tiene el de la provincia vecina de Valladolid, donde en noviembre se incorporó una única mujer a su Consejo de Gobierno eclesiástico, un organigrama que es el equivalente al de concejales de un equipo de Gobierno de un Ayuntamiento.

En el caso de Zamora, las dos personas laicas que se incorporan al "núcleo duro" de monseñor Valera son la catedrática de Lengua y Literatura, voluntaria de Cáritas y miembro del Consejo Parroquial de Almeida de Sayago Tita Mielgo y el laico licenciado en Teología Juan Carlos López Hernández.

Este último asume además una de las cuatro grandes áreas en las que se reestructura la Diócesis, la delegación episcopal de Cultura, Patrimonio y Sociedad, que abarca las áreas de Comunicación, Enseñanza, Oficina de Patrimonio, Archivo, Biblioteca, Restauración, Museo, Centro de Formación Teológica y Fundación ZamorArte. De hecho, López Hernández era ya director de esa fundación.

En cuanto a las dos mujeres que por primera vez se incorporan al órgano de dirección del Obispado, junto a Tita Mielgo, la otra es la religiosa es María Amparo Hidalgo, religiosa del Amor de Dios. Actualmente es administradora general y titular delegada de la Residencia Amor de Dios de Zamora y ha sido consejera General del Amor de Dios durante 18 años, además de misionera en América Latina.

Junto a ellos, este martes también han tomado posesión de sus cargos para los próximos tres años Antonio Jesús Martín de Lera como Vicario General y "número dos" de la Diócesis tras el obispo Fernando Valera.

Por su parte, Pedro Faúndez Mayo es a partir de ahora el Provicario General-Moderador de la Curia y Vicario Judicial; Juan Luis Martín Barrios el Vicario episcopal para la Delegación episcopal de Comunión Fraterna; Francisco Ortega Vicente Rodríguez, el nuevo Vicario episcopal para la Delegación episcopal de Evangelización; y César Salvador Gallego, el Vicario episcopal para la Delegación episcopal de Misión Samaritana. Además de esos ocho integrantes de su Consejo de Gobierno, en el acto de toma de posesión el prelado zamorano también firmó las atribuciones que otorga para el próximo trienio al sacerdote Pedro Juan Martínez Serrano como canciller-secretario general.

La apuesta por laicos y mujeres para el Consejo de Gobierno no es una medida adoptada unilateral o caprichosamente por el obispo, sino que responde a un nuevo estilo de gobierno "sinodal, plural y moderno" que incluye a laicas y laicos en el máximo órgano de decisión de la Diócesis como "signo de renovación de las estructuras de la Iglesia, acorde con el que pide el Santo Padre".

En esa tendencia marcada por el Papa Francisco, los cambios y la renovación de estructuras buscan como objetivo último "la misión evangelizadora de la Iglesia y la mejora de su capacidad para responder a los desafíos contemporáneos".

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