El cuerpo de los zamoranos, diseñado para asumir como máximo 34,1 grados

El Ministerio de Sanidad advierte que, cuando el mercurio supere esa cifra, se dispararán los efectos nocivos en la salud de los ciudadanos

Una mujer se protege del sol con una gorra en la playa de los Pelambres. | Jose Luis Fernández

Una mujer se protege del sol con una gorra en la playa de los Pelambres. | Jose Luis Fernández

Luis Garrido

Luis Garrido

Cuidado cuando el termómetro llegue a los 34 grados, porque en ese preciso instante se activarán todas las alarmas. Es el punto en el que ha establecido el Ministerio de Sanidad el umbral de temperatura máximo a partir del cual se dispara la mortalidad en la provincia de Zamora. Lo ha hecho en base a un análisis de los últimos veinte años, monitorizados dentro del Plan Nacional de Actuaciones Preventivas de los Efectos de los Excesos de Temperaturas Sobre la Salud. En ese extremo, el cuerpo puede comenzara experimentar calambres, deshidratación, insolación y, como último efecto, un golpe de calor con problemas multiorgánicos que pueden incluir síntomas tales como inestabilidad en la marcha, convulsiones e incluso paradas. Ahora, todos los zamoranos saben lo que tienen que hacer para evitarlo y, sobre todo, el nivel del mercurio a partir del cual todo puede comenzar a empeorar.

Ciudadanos esquivan el sol directo sobre los ojos. | Ana Burrieza (Archivo)

Ciudadanos esquivan el sol directo sobre los ojos. | Ana Burrieza (Archivo) / Luis GarridoL. G.

Nunca antes se había conocido con tanta precisión la temperatura que el cuerpo de un zamorano está en disposición de soportar antes de afectar a su salud. Como no es lo mismo vivir a orillas del Duero que a orillas del Guadalquivir, el Ministerio de Sanidad ha afinado su tecnología para concluir que, aquí, se puede llegar hasta los 34,1 grados sin problema ninguno. Pero, a partir de ahí, mucho ojo. El mapa activado por el Gobierno de España advierte que superar esos grados centígrados dispara la mortalidad y, previendo que va a ocurrir varias veces a lo largo del verano que comienza en el día de hoy, arroja una serie de medidas para evitarlo.

El mapa está dividido en 182 áreas geográficas, denominadas zonas de meteosalud, que son espacios territoriales que mantienen un comportamiento de temperatura homogéneo y de las que puede haber varias en una sola provincia. Para cada una de estas áreas, y con la información que proporciona diariamente la Agencia Estatal de Meteorología, el plan asigna un umbral máximo de temperatura a partir del cual se disparan los efectos nocivos del calor y que en Zamora será de esos 34,1 grados. Cifra grabada a fuego.

El umbral de temperatura desciende hasta los 30,9 grados en Sanabria

No aguanta igual el calor una persona nacida y criada en Zamora ciudad que otra oriunda del corazón de Sanabria, así que el umbral a partir del cual se disparan los riesgos para la salud tampoco puede ser el mismo. El Ministerio de Sanidad ha rebajado en más de tres grados centígrados esa temperatura máxima que los cuerpos pueden soportar en la comarca sanabresa respecto al resto de la provincia. En concreto, se trata de 30,9 grados centígrados, que contrastan con los 34,1 de la meseta zamorana. En los últimos veranos, no ha sido complicado ver tandas de jornadas consecutivas por encima de los treinta grados en el entorno del Lago, de manera que es previsible que los avisos vuelvan a saltar a lo largo de la temporada estival. El Gobierno de España ha advertido que, por cada grado que la temperatura ambiente supera esos umbrales, el riesgo de mortalidad atribuible a las altas temperaturas crece entre un 9,1 % y un 10,7 %. Es decir, por cada día que hay un episodio de calor extremo, la mortalidad se incrementa, de media, en tres defunciones al día. Zamora, de hecho, es una de las provincias con mayor tasa de mortalidad por altas temperaturas en los últimos veranos, con 65 fallecidos por cada 100.000 habitantes solo durante el año 2023, de acuerdo con las cifras oficiales aportadas por el Ministerio de Sanidad.

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