Entretenimiento en familia, en la piscina de Toro

La piscina municipal de Toro se convierte durante el verano en un punto de encuentro de vecinos y de toresanos que regresan a su ciudad natal para disfrutar de sus vacaciones. El recinto deportivo y de ocio, situado en el camino Ruales, dispone de una piscina de 1.014 metros cuadrados para adultos con capacidad para 500 personas, mientras que el aforo de la pequeña, de 220 metros cuadrados, es de cien usuarios. 

Además, cuenta con una amplia zona de césped, en la que los bañistas pueden descansar y tomar el sol, al margen de un chiringuito con una variada oferta que, con el paso del tiempo, se ha convertido en un servicio muy demandado por los usuarios. Numerosos toresanos y vecinos de otros pueblos del alfoz acuden durante todo el verano a la piscina, que abrió sus puertas el pasado 20 de junio con una jornada gratuita. Como novedad, este año el Ayuntamiento ha decidido ampliar el horario de apertura y los bañistas pueden disfrutar de sus instalaciones de forma ininterrumpida, desde las 11.30 hasta las 20.30 horas. 

Precios reducidos

Consciente de la elevada demanda de la piscina y de que se ha convertido en un servicio esencial para los toresanos durante el verano, el Ayuntamiento ha decidido mantener los precios de las entradas, abonos y carnés. Así, el coste de las entradas para niños de entre 4 y 12 años tienen un coste de euro; de 1,50 euros para los bañistas de 13 a 16 años y los que superen esa edad, tendrán que abonar 2,20 euros. Los abonos de 15 días, que se pueden adquirir en la piscina y en la Oficina Municipal de Turismo tienen un precio de 10, 16 y 24 euros, en función de si los usuarios tienen menos de 12 años, si su edad oscila entre 13 y 16 años o si la rebasan. Los precios de los carnés individuales se mantienen en 18, 25 y 40 euros, mientras que los que pueden adquirir las familias integradas por cuatro miembros o menos tienen un coste de 60 euros, precio que se reduce a 45 euros en el caso de las familias numerosas con cinco miembros o más. 

Un equipo de socorristas garantiza la seguridad de los usuarios que durante la temporada de baño utilizan la piscina para nadar, refrescarse o disfrutar en compañía de familiares, amigos y vecinos. 

El recinto deportivo y de ocio, al margen de las dos piscinas, cuenta con un edificio principal que alberga los vestuarios y estancias anexas y otro en el que se localizan las instalaciones de depuración del agua.