Crónica de la jornada electoral europea en Zamora: Vocales en sillas de párvulos y votos que acaban en otra urna

El día electoral fue pródigo en anécdotas, dejó en evidencia que aún hay barreras arquitectónicas en algunos colegios y demostró la importancia de los suplentes para sacar la faena

Una votante en silla de ruedas introduce el voto en la urna

Una votante en silla de ruedas introduce el voto en la urna / Miguel Ángel Lorenzo

Natalia Sánchez, Leticia Galende y Carlos Gil

Miembros de una mesa sentados en sillas de párvulos, el voto de una mujer que acabó en la urna de al lado, la existencia aún en los tiempos que corren de colegios electorales inaccesibles a las sillas de ruedas y el gran porcentaje de titulares que no acuden a sus puestos de vocales o presidentes, situaciones salvadas por sustitutos, han sido parte de las incidencias de la jornada electoral, junto con algunos otros fallos detectados por ejemplo en la colocación de las papeletas que quedaban ocultas a los votantes (como denunció Existe) o que simplemente no cabían en las cabinas (había 34).

La Hispanidad. En el principal colegio electoral del barrio de Los Bloques la anécdota de la jornada la protagonizó una señora mayor que metió el voto en la urna antes de que el presidente comprobara su nombre de la lista. Resulta que le tocaba votar en la mesa del al lado. La junta electoral declaró voto válido, aunque obligó a que constara la incidencia.

8 y 9. Aunque la participación ha sido baja, ha habido momentos de bastante afluencia a los colegios electorales sobre todo «después de la misa» y a última hora de la tarde. 10. Momento en que un votante introduce el sobre con la papeleta de su elección en la urna. | Fotos Miguel Ángel Lorenzo y Ana Burrieza

Era difícil encontrar la papeleta en la cabina / Miguel Ángel Lorenzo

La Hispanidad. En el principal colegio electoral del barrio de Los Bloques la anécdota de la jornada la protagonizó una señora mayor que metió el voto en la urna antes de que el presidente comprobara su nombre de la lista. Resulta que le tocaba votar en la mesa del al lado. La junta electoral declaró voto válido, aunque obligó a que constara la incidencia.

Pinilla. Miembros de las mesas se quejaban de que "no nos dan ni agua". Una madre y su hijo eran presidenta y suplente de la misma mesa electoral: al final acudió a la mesa el hijo porque su madre no se encontraba bien.

Vocales en sillas de párvulos y votos que acaban en otra urna

Representantes de los partidos en sillas de párvulos / Miguel Ángel Lorenzo

Pinilla. Miembros de las mesas se quejaban de que "no nos dan ni agua". Una madre y su hijo eran presidenta y suplente de la misma mesa electoral: al final acudió a la mesa el hijo porque su madre no se encontraba bien.

Alejandro Casona. Una votante se dejó olvidada la cartera y nadie se percató del detalle. Volvió a por ella al rato y la recuperó.

Vocales en sillas de párvulos y votos que acaban en otra urna

Fernando Moralejo, un suplente de 69 años que no quiso renunciar por la edad / Migue Ángel Lorenzo

San Frontis. Hay dos escalones en la puerta de acceso al local de la Asociación de Vecinos, una barrera inaceptable en los tiempos que corren. Hubo que sacar la urna a la calle para votantes en silla de ruedas. Un vocal propuso las antiguas escuelas de San Frontis. De los seis miembros de las dos mesas electorales, tres eran suplentes.

La Villarina. Normalidad en colegio electoral más pequeño.

Claudio Moyano. El colegio más populoso de Zamora congregó a la mayoría de sus votantes en las postrimerías de la jornada electoral. Buena parte de las mesas tuvo problemas para constituirse con las designaciones titulares, pero se solucionó con suplentes.

Vocales en sillas de párvulos y votos que acaban en otra urna

Las tres jóvenes componentes de una mesa del Ángel Nieto trasladada al San José de Calasanz / Miguel Ángel Lorenzo

Claudio Moyano. El colegio más populoso de Zamora congregó a la mayoría de sus votantes en las postrimerías de la jornada electoral. Buena parte de las mesas tuvo problemas para constituirse con las designaciones titulares, pero se solucionó con suplentes.

Maestro Haedo. La accesibilidad se ha tornado en imprescindible de una vez por todas y por ello este céntrico instituto de la capital zamorana facilitaba durante la jornada de ayer la entrada a personas con movilidad reducida por dependencias distintas a las del resto de los ciudadanos.

Arias Gonzalo. Es uno de los colegios con las mesas con mayor número de votantes de toda la ciudad, lo que ha facilitado el trasiego de personas a lo largo de toda la jornada. Se registró más afluencia por la tarde.

Vocales en sillas de párvulos y votos que acaban en otra urna

Vocales en sillas de párvulos y votos que acaban en otra urna / C. G. A./L. G. M./N. S./L. G.

Gonzalo de Berceo. La primera mesa constituida en la capital fue una de las de este centro de escolar, con todo a punto a los 8.03 minutos. Madrugadores y sin incidencias, pero con bastantes quejas de vocales, interventores y apoderados a los que les tocó estar en clases de Educación Infantil. "Tenemos mesas y sillas de niños pequeños y estar doce horas en ellas, te dejas la espalda", criticó una de las apoderadas.

Juan XXIII. El centro escolar contó estas elecciones con varios cambios lo que provocó el despiste de muchos vecinos. En vez de entrar por la puerta principal, había que ir por el patio para llegar directamente hasta el gimnasio o el comedor donde se ubicaban las mesas electorales. Cambio que gustó a la mayoría, a pesar de la "confusión inicial" por ser más directo y no tener que votar en las clases o "reducidos" despachos, algo que ocasionaba "largas colas" en los pasillos. No obstante, el representante de una de las candidaturas se quejó por las malas condiciones de trabajo.

Obispo Nieto. Se agradecieron los grados que había bajado la temperatura ambiente, lo que evitó los calores del gimnasio de otras elecciones. Como en la mayoría de los colegios, la participación, fue a cuentagotas hasta "la salida de misa" cuando se empezó a animar, con una "mayoría personas mayores y pocos jóvenes". Se notaba menor afluencia que en otros comicios.

Vocales en sillas de párvulos y votos que acaban en otra urna

Un ciudadano vota en un colegio electoral. / Ana Burrieza

Río Duero. Hugo Prada votaba por primera vez y le tocó mesa. Este estudiante de Criminología no estaba en casa por lo que tuvo que ir a por la notificación y se encontró con la sorpresa de que le tocaba ser presidente titular. "¡Es lo que se llama empezar por todo lo alto!", bromeaba el joven entre votante y votante. En este colegio electoral se sucedía a última hora de la mañana la entrada por la rampa de personas con muletas o andadores. "Hay que cumplir con las normas y yo vengo todas las convocatorias", decía una octogenaria a lo que su marido respondía que "hay que molestarse por los que se molestaron antes".

La Candelaria. Una mesa cambió de ubicación y había electores despistados que no sabía dónde les tocaba o incluso uno de 19 años acudió sin el carné "pero nos ha dicho que va a volver" decía con una sonrisa la presidenta de la mesa. Otra se formó solo con suplentes minutos antes de las 09.00 horas. La incomparecencia de los titulares afectó, entre otros, a Fernando Ramos, que en las anteriores había sido vocal, acudió a las 8 de la mañana pese a no ser titular de presidente porque "entiendo que hay que venir, pero la gente pasa porque la Justicia no pone multas y esto va cada convocatoria peor". Y en una tercera, unos señores de avanzada edad introdujeron en la urna, a primera hora de la mañana, la propaganda electoral remitida a casa por el partido de su elección en lugar de la papeleta oficial. Será voto nulo.

Vocales en sillas de párvulos y votos que acaban en otra urna

Votaciones de las Elecciones Europeas en Zamora / Ana Burrieza

San José de Calasanz. "Antes votaba del Ángel Nieto, ahora ¿en qué mesa me toca?". Esta pregunta la escucharon el domingo decenas y decenas de veces los apoderados de los partidos políticos en el colegio San José de Calasanz, ya que a este centro debutaban los casi 2.000 electores del pabellón deportivo. Fernando Moralejo, era suplente segundo de su mesa y al faltar la persona titular y el primer suplente, acabó tocándole. Podía haber renunciado por edad, pero "nunca había formado para de una mesa electoral y me apetecía". En el aula contigua se encontraba una presidenta y dos vocales veinteañeras todas titulares y que debutaban en sus puestos, en una mesa que antes correspondía al Ángel Nieto.

Jacinto Benavente. Las barreras arquitectónicas, que dificultaron el acceso de votantes que iban con carritos de bebé y sillas de niños de corta edad, o la ubicación de una mesa en una de las clases de infantil, con el problema que supuso para los vocales escribir en puestos pensados para menores 3 a 6 años, protagonizaron la jornada electoral en este colegio asentado en el barrio de la Horta, donde se presentó una representante de "Se acabó la fiesta" que no estaba acreditaba.

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