El Balonmano Zamora se da un baño de Plata en su despedida

El BM Zamora Enamora concluyó la liga con una contudente victoria. Un 30-21 ante Horneo que sirivió para agradecer a sus seguidores más fieles todo lo vivido y sufrido con ellos durante esta convulsa temporada. Era la despedida de la División de Plata y la intención era decir adiós con la mejor de las sensaciones, a pesar del amargor de un descenso a Primera Nacional que se rubricó hace ya varias semanas. Enfrente un Alicante que sí se la jugaba pero que en los primeros compases estuvo a merced de unos pistacho que empezaron mandando en el marcador. Ligeras ventajas en el Camba que los levantinos conseguían neutralizar (2-2, min. 5) aunque Rafa Paulo no tardó en volver a poner el +1 liderando el ataque de los locales que a pesar de su buen inicio no lograban despegarse. Cubillas puso el 4-2 en un encuentro en el que la efectividad en ataque estaba dando la espalda a ambos bandos que llegaron al ecuador del primer tiempo con un ajustado 5-4 en el marcador. El BM Zamora fue abriendo brecha con un juego más fresco y alegre de un rival más atenazado por los nervios, pero que seguía vivo y lo demostró cuando en un arreón puso el empate a 8.

El juego era intenso y los de Soto no tardaron en recuperar su control del marcador de una primera parte de buen juego, aunque al descanso la renta lograda era mínima (12-11) y era el momento de comprobar hasta dónde podía llegar la gasolina.

Se reanudó el encuentro y pasaron dos minutos hasta ver el primer gol, obra de Costas. El BM Zamora parecía haber salido más fresco de vestuarios y trató de aprovechar su buen momento con dianas de Peinado y Torres, a las que trataban de responder los alicantinos (15-13, min. 35). Alicante empezaba a darse cuenta de que el encuentro se le iba y subió la presión con dos ataques consecutivos para recuperar el equilibrio en el electrónico. El encuentro en el Camba seguía siendo un “toma y daca” entre dos equipos de la zona baja, aunque sí hay que admitir que la ausencia de tensión estaba beneficiando a los “Guerreros de Viriato” (18-16, min. 40). Los de Diego Soto querían más y no aflojaron ante su público, logrando la mayor renta hasta el momento: 4 arriba (20-16).

Alicante paró el encuentro. El entrenador veía necesario espolear a los suyos viendo que las opciones de permanencia se le escapaba, pero los de casa no estaban dispuestos a ceder. La renta subía a cinco goles en el ecuador del segundo tiempo, mientras que a los visitantes les empezaban a entrar las prisas lo que propiciaba errores y precipitaciones en el ataque. Con un 23-17 se entró en los últimos diez minutos de juego. El BMZ seguía llevando la batuta ante un Horneo cada vez más desesperanzado porque eran incapaces de sobrepasar el muro erigido por los zamoranos que se estaban mostrando muy serios en defensa.

Así se entraron en los últimos cinco minutos de partido, y los últimos en Plata. 25-20 en el marcador era el momento de aguantar y no solo lo hicieron, sino que siguieron apretando hasta el final, cuando el marcador reflejó un definitivo 30-21.

A partir de ahí, la emoción de la despedida con un público fiel con el que volverán a encontrarse, aunque sea en Primera Nacional. Abrazos, aplausos y la promesa de volver.