La fiesta de San Pedro reúne a vecinos y emigrantes en Gallegos del Río

Gallegos de Río se ha vestido con sus mejores galas este sábado para honrar a su patrono San Pedro en la jornada más concurrida del año gracias al reencuentro de los vecinos residentes con los emigrados y sus descendientes que no quisieron perderse la cita obligada con las fiestas patronales de sus ancestros, a los que se sumaron como ya se habitual numerosos forasteros.

El éxodo rural obligó hace ya varios años a trasladar los actos lúdicos y muy en particular las verbenas populares al fin de semana, algo que no ha hecho falta este año al caer el 29 el sábado y el 30 en domingo.

Los festejos comenzaron el viernes por la tarde con unas vísperas donde los primeros protagonistas fueron los más pequeños con los hinchables y con limonada para todos los presentes. Luego llegó la magia se hizo presente gracias la magnifico mago Josemari, un hombre de la tierra, pues es natural de la vecina localidad de Abejera. La primera verbena popular contó con la actuación del grupo “Tattoo”.

El “día grande” abría sus puertas con los pasacalles al son de la música de “Amanecer”. Hombres y mujeres, niños, jóvenes y mayores se vistieron con sus mejores galas con los actos más ancestrales y emotivos de las fiestas, la santa misa oficiada por el párroco José Alberto Sutil Lorenzo, y la procesión donde los feligreses procesionaron con su patrono San Pedro por las principales calles de Gallegos del Río.

La alcaldesa Lorena Gallego Velasco estuvo acompañada por el alcalde del Ayuntamiento Pascual Blanco Martín y el presidente de la Diputación Javier Faúndez Domínguez. Cumplido los con los ritos religiosos la comisión de fiestas ofreció una convidada durante el baile vermut con un aperitivo ante de irse a cumplir con la comida en familia.

Llegó el verano y que mejor alternativa que plantar cara al calor con un tobogán de agua deslizante donde, como no, los grandes protagonistas fueron los niños y las niñas que también sacaron buen rendimiento a los hinchables y toro mecánico.

Como cada año uno de los grandes atractivos de los festejos fue el concurso de disfraces. En cualquier buena fiesta alistana que se precie no puede faltar el folclore tradicional y en Gallegos del Río las danzas y tonadas al son de las gaitas, dulzainas y tamboriles llegaron de la mano del grupo de Aulas de música de Aliste y Tras os Montes de Trabazos por cortesía del Ayuntamiento de Gallegos del Río y de la Diputación de Zamora

Los actos más concurridos de las fiestas como ya es tradicional desde los años ochenta del pasado siglo XX son las verbenas populares. Para la de ayer de contrató a grupo “Cañón” de León. Muchos participantes de la mayoría de los pueblos de Aliste y Alba, pero muy en particular de los colindantes: Valer, Flores, Tolilla, Lober, Puercas y Domez. También se contó con la música de la disco móvil La Timba y del DJ Cristian Terrón Barrigón natural de Gallegos del Río.

La jornada del domingo, tras dos días de jolgorio y un no parar, estará marcada por la tranquilidad como ya es habitual en los pueblos alistanos donde la santa misa, en este caso en honor al apostol San Pablo, estará dedicada a la memoria y en recuerdo de todos los fallecidos de la historia de Gallegos del Río, que cerrará los festejos al mediodía con el baile vermut.

Mayordomo

La festividad de San Pedro era antaño en Aliste fiesta de guardar y uno de los días más importantes del año tanto a nivel religioso (parroquias) como del concejo (comunidad vecinal). Ese día tenía lugar el cambio de “Mayordomo de la Iglesia” uno de los cargos más significativos y representativos, dignos y respetados, en la antigua Vicaría de Aliste en el Arzobispado de Compostela.

Un cargo que implicaba a toda la familia pues ella se encargaba durante 365 días del cuidado, limpieza y decoro del templo, aparte el marido era el encargado de portar la insignia más preciada, la “Cruz Parroquial de Plata” (que también custodiaba en su casa), así como “Encordar “cuando fallecía un vecino del pueblo. En la mayoría de los casos se seguía el turno por el sistema de “Roda” por riguroso orden de fecha de “Casamiento” (Boda).

El 29 de junio se contrataba también al “pastor” que se encargaba del cuidado (pastoreo extensivo, sedentario y trashumante), del ganado de la raza de ovino “Castellana”: comenzaba su labor el 30 de junio y finalizaba el 29 de junio del año siguiente. El Pastor era quien se encargaba del “rebaño” que a su vez formaba. Los “atajos” (ovejas de cada familia). Una tarea que incluía el pastoreo de día y la dormida con las ovejas en “El Chiquero”. Aparte de la “soldada” (sueldo acordado) el día que le tocaba, por roda, la familia debía encargarse del rancho (comida del pastor) y manutención de los perros, acompañándole un miembro de la familia como zagal. El pastor era una persona muy querida que se sabía de quien era cada oveja y era invitado a matanzas y bodas.

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