Carriedo valora la cooperación con el Centro de Portugal para “superar la dispersión territorial”

El consejero de Economía y Hacienda reconoce que “falta masa crítica” en los centros tecnológicos de la comunidad, pero considera que la colaboración con el país luso permitirá “aumentarla”

El consejero de Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, y el alcalde de Salamanca, Carlos García Carbayo, participan en el VI Consejo Plenario CENCYL, Comunidad de Trabajo Castilla y León-Centro de Portugal.

El consejero de Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, y el alcalde de Salamanca, Carlos García Carbayo, participan en el VI Consejo Plenario CENCYL, Comunidad de Trabajo Castilla y León-Centro de Portugal. / Rubén Cacho / Ical

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El consejero de Economía y Hacienda de la Junta, Carlos Fernández Carriedo, valoró hoy la cooperación establecida por Castilla y León con la Región Centro de Portugal como forma de aprovechar “todas las capacidades” del Corredor Atlántico en estos dos territorios para así “superar la dispersión territorial y estar situados en el ámbito de la periferia de la Unión Europea”.

Así lo manifestó, en declaraciones recogidas por Ical, durante la celebración de la mesa redonda "Competitividad asociada al Corredor Atlántico" que tuvo lugar con motivo del VI Consejo Plenario de la Comunidad de Trabajo del Centro de Portugal y Castilla y León (Cencyl), que se celebró esta mañana en la localidad lusa de Aveiro.

Carriedo reivindicó que ambas regiones tienen “elementos muy positivos” desde el ámbito de la competitividad en el mercado mundial, como contar con una economía “diversificada” y trabajadores “muy bien cualificados, con un alto nivel formativo”, que hace que tengan “bases sólidas para que nuestros productos tengan presencia en los mercados”.

Sin embargo, el consejero de Economía y Hacienda reconoció que tanto Castilla y León como la Región Centro de Portugal cuentan con dos desventajas: “un territorio disperso, extenso, con áreas geográficas rurales que hacen que la logística sea más complicada”, y estar “situados en el ámbito de la periferia de la Unión Europea”.

Por eso, mostró su esperanza en la colaboración establecida desde los años 90 a través de Cencyl, y que ahora, ante la perspectiva del desarrollo del Corredor Atlántico, “nos obliga a trabajar conjuntamente” para superar “la dispersión del territorio y la periferia”.

No obstante, Carriedo puso en valor que territorios como Castilla y León ya están situados a la cabeza de las exportaciones, al liderar el crecimiento del país el pasado año y mantener un superávit comercial frente al déficit del resto del país, gracias a ejemplos como el de Network Steel, cuya sede en Sosa (Portugal) visitó el presidente de la Junta, y que “con capital español y dos fábricas en Castilla y León”, demuestra la importancia que tendrá el Corredor Atlántico por establecer una conexión “más competitiva”, vinculando más empresas y sectores no solo con Portugal sino “más allá de los Pirineos”.

En cualquier caso, Carriedo sí reconoció que es importante “reforzar no solo las conexiones más allá de los Pirineos, sino las internas” para “reducir costes y completar la cadena de valor”, logrando una mayor competitividad al “abaratar costes”. Algo para lo que “se puede aprovechar el trabajo común” entre la Región Centro de Portugal y Castilla y León.

Además, valoró también las propias capacidades de ambas regiones por tener “conocimiento y capacidad de transferirlo” a través de universidades como la de Salamanca, “con más de 800 años de historia”, o los diez centros tecnológicos con los que cuenta Castilla y León y donde solo “falta masa crítica”, algo que “sumando esfuerzos”, se podrá contrarrestar para “aumentarla”.

También representó a la Junta en esta mesa el director general del ICE, Augusto Cobos, que llamó a considerar el mercado del Centro de Portugal y el de Castilla y León como “único de proximidad” para facilitar el trabajo de captar clientes de las empresas, y recordó que el Corredor Atlántico permitirá “una vía directa a los mercados europeos” que, sin crecimiento de infraestructuras, “es prácticamente imposible”.

Corredor Atlántico, “gran prioridad”

Por su parte, el alcalde de Salamanca, Carlos García Carbayo, ensalzó el “modelo económico de éxito”, basado en el turismo y los servicios, de su ciudad, aunque reconoció que se necesita “complementarlo con un nuevo modelo de logística y transporte de mercancías” donde el Corredor Atlántico aparece como “la gran prioridad”.

No obstante, y para estar preparada, Carbayo recordó que la ciudad está construyendo un puerto seco que estará listo “a principios de 2025” y alrededor del que se sigue desarrollando suelo industrial y logístico con más de 130.000 metros cuadrados puestos en marcha en una primera fase a la que siguió una segunda con otros 244.000 metros y una tercera “en proceso”.

“Si Salamanca puede crecer, es por trabajo en logística y tecnología”, apuntó Carbayo que, no obstante, reconoció que necesitan “la cooperación transfronteriza con Portugal” y que se sigan desarrollando infraestructuras como el eje ferroviario Aveiro-Viseu-Salamanca a través de la electrificación del tramo con Fuentes de Oñoro, la Ruta de la Plata como forma de conexión entre el norte y el sur de España, o el propio Corredor Atlántico, para el que pidió “obras”.

Y es que esa misma fue la petición del presidente de la Cámara Municipal de Viseu, Fernando Rúas, que consideró que ha llegado el momento de “dejar los encuentros y llamar la atención a los gobiernos centrales para que se pongan manos a la obra” en la construcción de infraestructuras. Una idea en la que coincidió y amplió el presidente del Consejo Empresarial del Centro, José Couto, al recordar que “cualquier cosa que hagamos hoy no tendrá repercusión hasta dentro de diez años” y que, por tanto, se está retrasando “el desarrollo de las futuras generaciones”.