Lázaro Sanabria, maestro pastelero de la localidad vallisoletana de Medina del Campo, ha conseguido una mezcla perfecta para elaborar unos dulces cuyo ingrediente principal es un tinto joven de la bodega toresana Liberalia Enológica. Se trata de una especie de «nube» de golosina elaborada a base de agua, azúcar, gelatina y el toque estrella que la tinta de Toro otorga al producto. Un elemento que, según explica, «devuelve a muchos adultos el sabor de su infancia cuando tomaban vino con azúcar en la merienda».

Las «nubes» de tinta de Toro suponen la cuarta colaboración entre el pastelero medinense y la bodega Liberalia Enológica. Anteriormente ya se habían unido para idear creaciones como helado, turrón o bombones con vino de la tierra. Ahora el resultado es más goloso aún si cabe. Según explica Lázaro Sanabria en declaraciones recogidas por EFE, el proceso tiene su aquel. «Los ingredientes son sencillos, pero la elaboración ha de ser milimétrica para conseguir este dulce para adultos», comenta. El producto ha sido puesto ya a la venta en la pastelería de Lázaro Sanabria en Medina del Campo, así como en las instalaciones de Liberalia Enológica, en tarros en los que entran unas doce unidades, según ha explicado el innovador vallisoletano.